martes, 6 de noviembre de 2007

Envasado en echos reales II




Hacia un día azul, los pájaros hablaban de intrascendencias en la plaza.
El sonido de un megáfono rompió la calma.
-¡¡Venid, venid a ver la feria de los muertos donde es mas importante el tiempo que en que gastarlo!!
-¡¡Venid a ver como el señor Tic Tac maneja las vidas aceleradas!!
-Venid a ver como se enlatan amores. ¡Comprad vuestro amor en conserva!
-Tened uno coma cinco hijos, un perro y una casa en Mallorca.
-Gastad, gastad, comprar, ¡comprar!
Señor M, apoyado con los codos en el respaldo del banco le miraba con el cigarro en la boca.
-Tienes que hacer esto de verdad?
-No quieres empapelar la ciudad de fotos.
-quiero ir de cañas a la luna.
-Ahora vamos, tranquilo… ¡Señora compre un kilo de dignidad para sus hijos sin casa!
-¿quien era esa? Me suena. Pregunto
M.

-No se… una madre… ¡¡Venid a ver la feria de los muertos o miraros en el espejo y preguntaos si habéis visto amaneceres de verdad!!!
¡¡La elección te hace libre!!
¡¡Más física quántica y Platón y menos prozac!!

Con los ojos abiertos solo veo oscuridad, con los ojos cerrados solo escucho colores brillantes. ¿Caminar con los ojos cerrados?
No.
Aprender a mirar…
observar, escuchar, absorber.
No hay imposibles.
Aprender a brillar. Sacad a pasear la mejor imagen de vosotros mismos que podais imaginar.

La mañana transcurría tranquila, M y A brindaron en una terraza en la luna por una vida sin el señor Tic Tac.

Donde nos lleva el rio? donde tu quieras

1 comentario:

Lola dijo...

El señor TicTac quiere hacerse con los mejores segundos de todos, menudo especulador.

Hacéis bien brindando en la luna, ahí siempre se brilla...